Webs que empoderan equipos y exprimen la información con JAMStack
Según la Pirámide de las Marcas, ideada por nuestro CEO cofundador Ismael Barros, la primera necesidad de una empresa es la rentabilidad. Una vez alcanzada, la siguiente meta es la estabilidad. Después, la fidelización, la visibilidad y, en última instancia, la transcendencia. Y para recorrer todo este camino, cualquier organización digital necesita una web que actúe como escaparate. Como canal propio para activar la marca y que brote por todas partes.
Por eso, es habitual que los proyectos de branding que nos retan cada día desemboquen en la creación de una web. Y en Soluble siempre buscamos que sean útiles, eficientes y empoderadoras para que los equipos trabajen más felices.
Pensando en la consecución de este objetivo, nuestro equipo de Tecnología trabaja con el enfoque JAMStack, que permite ensamblar una web con los datos y las herramientas que una empresa utiliza en su día a día para poner toda la información ordenada bajo un mismo Design System.
Podemos explicarlo desde un punto de vista un poco más técnico, pero también revelador: JAMStack es una arquitectura que separa la gestión de los datos que alimentan una web de aquello que se muestra a la persona que la visita. Por ejemplo: si una empresa utiliza Notion, un CRM como Hubspot o una base de datos interna para tener todo su catálogo registrado, esa fuente de información se conecta con distintas herramientas para ordenarlo y mostrarlo a los usuarios.
Se trata de un sistema que utiliza APIs para generar páginas estáticas y servirlas a través de CDNs (conjuntos de servidores que suministran la información con más eficiencia). Y eso tiene muchos argumentos a favor en términos de velocidad —¡hola, SEO!—, costes y respeto por la huella medioambiental.
Esto es solo un aperitivo. Acompáñanos a desgranar sus principales ventajas.
Autonomía, agilidad y calidad: exprimir los datos
Cuando se trata de trabajar con una web, los equipos se encuentran, habitualmente, con la necesidad de priorizar la agilidad, la autonomía o la calidad. Conseguir las tres al mismo tiempo es difícil, porque la agilidad y la autonomía suelen estar relacionadas con una pérdida en la consistencia de marca. Del mismo modo, un producto digital que permite que un equipo sea autónomo, no suele ser la solución más ágil. Por supuesto, si quieres calidad y agilidad, es probable que necesites la ayuda de terceros para crear una solución a medida.
Es, en este punto, donde JAMStack se convierte en una solución ganadora.
Poder para los equipos, tiempo para lo importante
Los pros de JAMStack se pueden resumir en cuatro grandes categorías:
- Utilizar herramientas con las que el equipo ya está familiarizado, y que realmente utiliza en su día a día. Adiós procesos duplicados. Un cambio en una base de datos interna (por ejemplo, un catálogo) solo se aplica una vez, porque la web bebe de esa fuente. Esto, a su vez, evita la preocupación por la parte visual: los equipos siguen trabajando de la forma más eficiente y la web se construye a partir del buen trabajo ya hecho.
- A nivel de tecnología, JAMStack permite que el mismo Design System compartido por todos los productos de la empresa se utilice en la web “comercial", que suele ser gestionada por un equipo de marketing. Toda la presencia digital de la empresa cuenta con el mismo material para el desarrollo. Además, se trata de tecnologías amigables con desarrolladores de producto: de nuevo, facilidades, agilidad y felicidad para el equipo.
- Como gestor de contenidos, o repositorio de los datos que luego se muestran al usuario, en Soluble utilizamos generalmente DatoCMS, porque permite gestionar distintos entornos con mucha facilidad. Puede haber uno de pruebas, para ver cómo queda un cambio en la web —un post de blog, cambiar el copy de la home…— antes de publicarlo, y también uno de producción para desplegar las modificaciones definitivas. Incluso se puede generar, a golpe de click, un entorno aislado para hacer pruebas más ambiciosas en proyectos largos que requieren muchos cambios. Y después, cuando estamos seguros de todo, mezclar las novedades con el entorno principal sin que la web deje de estar operativa. Es decir, con JAMStack resulta mucho más ágil trabajar en features grandes conviviendo con el día a día de la web, porque este tipo de soluciones suelen ser más robustas y escalables.
- Tener el 100% del control sobre lo que se publica. Toda la información queda en la infraestructura de la empresa. Una de las grandes ventajas frente a otros gestores de contenido más extendidos.
Entonces… ¿Por qué JAMStack y no un CMS más convencional?
Esta pregunta es muy frecuente: ¿cuál es el motivo de utilizar JAMStack y no Webflow o WordPress, por ejemplo? Aunque es cierto que los gestores de contenido más convencionales también ofrecen agilidad y autonomía, no permiten un uso excelente de los datos.
Es probable que la experiencia de gestión de los datos más puramente estáticos, como las páginas de un blog o las secciones, sea más agradecida con este tipo de soluciones porque puedes ver los cambios en tiempo real, aunque se pierden ventajas que, para muchos proyectos, son realmente importantes:
- La infraestructura propia. En el caso de Webflow, se dependería siempre de la suya.
- Facilidad para gestionar webs con varios idiomas.
- Lo que se hace en este tipo de CMS más ‘comerciales’ se queda en su entorno y no se puede aprovechar para más cosas. Por ejemplo, un catálogo de productos creado en Webflow no se puede aprovechar para crear un portal de cliente.
- No se pueden conectar fuentes externas. Por tanto, si queremos añadir en una misma web un blog, documentación de la API o un Help Center, habría que mantener esos datos a mano o importar los contenidos manualmente.
Con los CMS genéricos, ese primer setup siempre es muy agradable, pero se trata de un destello que no deja ver más allá, porque a la hora de trabajar en nuevas features que cambian lo que ya existe, el trabajo acaba siendo menos ágil, con lo que los ciclos de release acaban siendo más largos y más frustrantes. JAMStack es una solución útil en el corto plazo y, sobre todo, en el largo, pues es una gran alternativa para el crecimiento y la escalabilidad.