Sobre marcas y un nuevo proyecto.
Sé que en la última Touchpoint había dicho que la próxima reflexión la escribiría Ritxi. Y la ha escrito (además es preciosa), pero se nos ha movido el calendario hasta coincidir esta edición con el lanzamiento de un proyecto en el que llevamos trabajando mucho tiempo. Hemos puesto el texto de Ritxi a buen recaudo para que se mantenga fresco hasta el próximo número.
Ayer se hizo pública la nueva marca, la nueva web y la nueva plataforma de Dozen, antes conocidos como The Crowd Angel. Para los no iniciados, algo así como un crowdfunding pero con tres diferencias principales: especialización en startups y empresas innovadoras, inversión mínima de 3.000€ y acompañamiento durante todo el proceso (un equipo experto filtra oportunidades y vela por los intereses de quienes invierten).
Empezamos a trabajar con ellos a finales de 2019. En enero de 2020 estábamos presentando la nueva marca a todo el equipo en un evento de esos de que echamos tanto de menos, sin mascarillas y con saludos efusivos. En paralelo, seguíamos trabajando la web y nos íbamos metiendo poco a poco en el producto.
Habíamos decidido dejar el lanzamiento de la nueva marca para cuando estuviera lista la nueva plataforma, con un enfoque mucho más centrado en la experiencia y las inversiones. Y de repente marzo. Congelamos todo ante la incertidumbre que se nos había presentado enfrente, esperando que pudiéramos trazar una hoja de ruta pronto, con alguna certeza.
Al poco tiempo se reanuda el trabajo con el producto digital y desde entonces no hemos parado. Y no se prevé que paremos, queda mucho por hacer y formamos un gran equipo con la gente de Dozen.
Ha sido uno de los proyectos más completos que hemos hecho en el estudio. No ya por el tiempo sino por la cantidad de frentes que hemos tenido la oportunidad de trabajar. Posicionamiento, cambio de nombre, identidad verbal, identidad visual, narrativa de marca, diseño y programación web y diseño y programación de producto. Mención especial a nuestro equipo de tecnología que se ha metido hasta las cejas con Guillem, CPO de Dozen, para adecuar el backend a la nueva etapa y dejar el frontend a la altura de la experiencia que ofrecen.
Es un proyecto en el que ha participado todo el equipo de Soluble, literalmente. Tanto las incorporaciones más nuevas como quienes ahora dan batalla desde otros frentes. Sofía y Máximo estuvieron con Ona y conmigo en la fase de marca; Jesús dejó su huella en los primeros pasos del producto y Ona, Laura y Maria se han encargado del diseño de la web y el producto hasta hacerlo realidad; Elísabet, Javier, Pablo y Laurent han estado dándolo todo con el código; Sora coordinando el proyecto y Ritxi ha puesto su magia para contar el proyecto.
Y por supuesto dar las gracias al equipo de Dozen por su implicación, confianza y valentía. Mucho talento en las filas de Ramon, Joaquim y Ramón. Destacar el papel de Guillem, Fernando y Emma que han sido claves para llegar hasta aquí.
Te dejamos un par de enlaces más abajo: el case study bien cargado de imágenes y un post en el blog con toda la literatura detrás del proyecto. Disculpa la autopromo pero nos hace especial ilusión compartir este trabajo con quienes nos leéis por aquí, por lo que ha significado y por el resultado.
¿Qué te parece?
Ismael Barros
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